Pero el riesgo de degeneración macular no supera los beneficios cardiacos del fármaco, aseguran los expertos.
El uso de aspirina a largo plazo podría aumentar ligeramente el
riesgo de desarrollar degeneración macular relacionada con la edad, una
importante causa de ceguera entre las personas mayores, sugiere un
estudio reciente.
Un estimado del 19 por ciento de los adultos de
EE. UU. reportan usar aspirina con regularidad, con frecuencia debido a
sus beneficios de protección cardiaca, y su uso aumenta con la edad. La
incidencia de la degeneración macular relacionada con la edad también
aumenta en la edad avanzada, lo que hace que examinar esta asociación
sea importante, señalaron los autores del estudio. Actualmente,
alrededor de 1.8 millones de estadounidenses sufren de la enfermedad
ocular, que destruye la visión central aguda.
El estudio halló
que el riesgo potencial es pequeño pero estadísticamente significativo,
"y hay que sopesarlo con la morbilidad y mortalidad significativas de la
enfermedad cardiovascular poco tratada", señaló la autora principal del
estudio Jie Jin Wang, investigadora principal del Centro de
Investigación sobre la Vista de la Universidad de Sídney.
Además,
"el aumento en el riesgo de degeneración macular relacionada con la
edad solo se detectó tras 10 o 15 años, lo que sugiere que la dosis
acumulativa de aspirina podría ser importante", comentó Wang.
Aunque
la aspirina está entre las medidas de prevención más efectivas para la
enfermedad cardiovascular, su uso regular a largo plazo se ha asociado
con efectos secundarios adversos significativos, añadió Wang. Hasta la
fecha, los resultados de los estudios sobre la relación entre la
aspirina y la degeneración macular no han sido constantes.
El informe, que aparece en la edición en línea del 21 de enero de la revista JAMA Internal Medicine,
recolectó datos sobre más de 2,300 personas. El uso regular de la
aspirina se definió como una vez o más por semana. Como parte del
estudio, los participantes se sometieron a cuatro exámenes oculares en
un periodo de 15 años.
Casi el once por ciento de los pacientes
usaban aspirina regularmente. Tras 15 años, alrededor del 25 por ciento
de los usuarios de aspirina desarrollaron lo que se conoce como
degeneración macular neovascular relacionada con la edad.
La tasa
acumulativa fue de alrededor del 9 por ciento entre los usuarios de
aspirina, frente a menos del 4 por ciento entre los que no tomaban
aspirina.
Sin embargo, las personas que toman aspirina por sus
beneficios preventivos para el corazón y el accidente cerebrovascular no
deben alarmarse, enfatizó Wang.
"Actualmente, no hay evidencia
suficiente para recomendar cambiar la práctica clínica, excepto quizás
en los casos de pacientes con factores de riesgo fuertes para la
degeneración macular relacionada con la edad, como una degeneración
macular relacionada con la edad existente en un ojo", comentó.
Otros expertos estuvieron de acuerdo.
"Unos
ensayos aleatorios controlados sobre el uso de aspirina, con un
seguimiento de hasta diez años, no han demostrado ningún aumento en el
riesgo de degeneración macular relacionada con la edad", planteó el Dr.
Gregg Fonarow, vocero de la Asociación Americana del Corazón (American
Heart Association) y profesor de cardiología de la Universidad de
California, en Los Ángeles.
Para la mayoría de pacientes, los
beneficios del uso regular de aspirina de dosis baja superan a los
riesgos potenciales, afirmó.
"Los individuos a quienes se receta
aspirina para la prevención cardiovascular primaria o secundaria no
deben preocuparse ni descontinuar esta beneficiosa terapia", planteó
Fonarow.
Otro experto, el Dr. Sanjay Kaul, director del
Laboratorio de Investigación sobre la Fisiología Vascular y la Trombosis
del Centro Médico Cedars-Sinai, en Los Ángeles, dijo que la evidencia
es insuficiente para saber si la aspirina provoca la degeneración
macular relacionada con la edad.
"Dado que no se trata de una
relación causal, los hallazgos [del nuevo estudio] son, en el mejor de
los casos, una hipótesis", señaló Kaul, coautor de un editorial
acompañante en la revista.
Para los pacientes, la evidencia que
respalda el uso de aspirina para prevenir un segundo ataque cardiaco o
accidente cerebrovascular es "indisputable", afirmó Kaul. Para prevenir
un primer ataque cardiaco o accidente cardiovascular, la evidencia sobre
los beneficios de la aspirina no está tan clara, y la decisión de
tomarla o no debe basarse en el riesgo individual y en el historial del
paciente, planteó.
Las personas que toman aspirina regularmente
para el dolor deben pensar en cambiar a otro analgésico para evitar los
efectos secundarios posibles, que también incluyen el sangrado, añadió
Kaul.
Otro estudio reciente, publicado en la edición del 19 de diciembre de la revista Journal of the American Medical Association,
halló que el uso regular de aspirina durante al menos 10 años aumenta
ligeramente el riesgo de desarrollar degeneración macular relacionada
con la edad.
"Los ataques cardiacos conllevan un riesgo alto de
muerte, así que la pregunta es si el posible aumento en [el riesgo de]
degeneración macular relacionada con la edad vale la pena en comparación
con el riesgo de sufrir un ataque cardiaco", planteó la investigadora
líder, la Dra. Barbara Klein, de la Facultad de Medicina y Salud Pública
de la Universidad de Wisconsin.
Klein dijo que los datos de su
estudio no sugieren que las personas deban dejar de tomar aspirina para
la prevención del ataque cardiaco.
No hay comentarios:
Publicar un comentario